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Primeras impresiones
Marzo 19, 2014 Si el año pasado las quejas se vertían sobre el rendimiento de los neumáticos presentados por Pirelli, este año son los motores los que, literalmente, se están robando lo poco que quedaba de espectáculo en la máxima categoría del automovilismo.

Lo mostrado en el trazado de Albert Park ya se preveía, pero ni los peores augurios señalaban equipos con miedo de correr y que la pelea en la pista fuera una historia sin desarrollar por las escuderías temerosas de perder un motor o quedarse sin combustible. Tal fue el nivel de miedo ante una epidemia de abandonos que resulta cuestionable la participación del auto de seguridad en un momento en que los equipos y la FIA no sabían si serían capaces de terminar la carrera la mayoría de los autos en pista.

El claro perdedor fue Renault que perdió cuatro unidades en la carrera aunque oficialmente sólo Vettel abandonó como resultado de su planta de poder francesa. Mercedes, si bien se mostró como el mejor preparado, puso a temblar a la categoría cuando desde los fosos suplicaban a Hamilton salir y salvar el motor mientras Rosberg se alejaba en solitario en la punta. Ferrari demostró una vez más que siguen la máxima de Don Enzo, "la aerodinámica es para aquellos que no saben hacer buenos motores", y lograron que todas sus unidades sobrevivieran aunque sus autos se mostraran sin ser contendientes al título.

Aunado a lo anterior está el hecho de lo poco atractivos que resultan los sonidos que emanan de los nuevos V6 de 1.6 litros y es evidente que tendremos una campaña dominada por la polémica de los motores y estos podrían terminar de matar el espectáculo que Pirelli, cumpliendo con las indicaciones de la FIA, acribilló el año pasado.

Apenas amanece en la campaña 2014 de la Fórmula Uno por lo que las conclusiones pueden ser prematuras como bien demostraron las grandes actuaciones de Bottas en Williams y Rosberg en Mercedes. Dos carreras que deberían ser el objetivo inmediato del resto de las escuderías.