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Poco elegante correr en Bahrein
Abril 18, 2012 Este fin de semana la Fórmula 1 regresa al circuito de Bahrein en el Medio Oriente y la pregunta gira alrededor de si fue la decisión correcta presentarse en un país donde no se respetan los derechos humanos.

Todos se acuerdan que el año pasado el mundo sufrió una revolución, todo cortesía de Facebook y de Twitter, donde las sociedades de Egipto y Tunez entre otras, cansadas de la opresión de sus dictadores, los echaron a la calle.

Bahrein está en una situación similar y eso canceló su Gran Premio en 2011.
Este año no se escucha tanto en los medios que la gente de Bahrein no está contenta con su gobierno o que hay muchos abusos y gente lastimada y en la cárcel de forma injusta.

Pero la Fórmula 1 ya está lista para correr y ya haz amenazas de disturbios y agresiones al evento por parte de la gente molesta con el gobierno de Bahrein, que ven la carrera como un capricho de sus gobernantes.

Fórmula 1 es un negocio y Bahrein paga casi 40 millones de dólares por tener la carrera, por su parte este país quiere estar en el mapa mundial y que mejor que un Gran Premio para lograrlo.

La Máxima Categoría tiene como línea no formar parte de los temas políticos de los países donde organiza eventos, lo cual está bien, pero cuando la gente sale lastimada por dar su opinión la Fórmula 1 no debería prestar su imagen para tales fines.

A la gran mayoría ya se le olvidó en los 80’s cuando F1 corría el Gran Premio de Sudáfrica cuando en ese país había el terrible Apartheid y como consecuencia la comunidad mundial condenó la carrera hasta que se canceló.

Los medios no pintan la situación tan grave, a pesar que un equipo de la Porsche Cup ya canceló su participación por miedo a que sus integrantes salgan lastimados, y lo más seguro es que no pase nada, los gobernantes de Bahrein saben que no se pueden dar el lujo de algo grave, pero al final pase o no pase nada, lo más correcto y elegante para la Fórmula 1 hubiera sido no hacer la carrera y esperar a que las cosas sean dignas en un país que hoy tiene ejercito de otro que no tolera la libertad para mantener el orden en las calles.