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De la sanción de Mercedes
Junio 28, 2013
Salió la sentencia del Tribunal Internacional de la FIA y no podría haber generado mayor polémica. El hecho que la sanción a Mercedes GP fuera una amonestación y la imposibilidad de participar en la prueba de pilotos jóvenes ha calado fuerte en el mundo automovilístico por lo que parece una jugada sucia más de Ross Brawn en su largo historial dentro de la Fórmula Uno.
Si bien Mercedes GP realizó una prueba de neumáticos que acarreó como consecuencia una posible ventaja en el desarrollo de su auto para la temporada 2013, también lo es los siguientes elementos:
- Mercedes GP solicitó claridad a la Federación Internacional del Automóvil (FIA) respecto al uso de su auto 2013 en una prueba de llantas conducida por Pirelli.
- La FIA señaló que Pirelli debería de cumplir con el contrato y tratar equitativamente a todos los equipos. Si esa condición se cumplía, podría llevarse a cabo la prueba.
- Paul Hembery, de Pirelli, confirmó que todos los equipos tendrían la misma oportunidad de acudir a probar neumáticos.
En este tenor, se efectúa la prueba secreta después del Gran Premio de España donde Mercedes GP obtiene información aunque Ross Brawn señala que genera mínima ventaja por ser más en el orden de la seguridad al momento de efectuar la prueba que para entender el desempeño del auto. Pirelli argumenta que no existía conocimiento de Mercedes GP respecto al tipo de neumático utilizado durante la prueba y, por ende, la información no resulta tan relevante para Mercedes GP como para los italianos. Además, contrario a lo señalado en un inicio y en la prensa, Hembery argumenta que efectuar la prueba de conformidad con lo establecido en el contrato y tener más equipos hubiera entorpecido la misma y vuelto prácticamente imposible realizarla por lo que, en aras de la seguridad del deporte que requería arreglar los problemas con los neumáticos, se efectúo de la manera en que se conoce.
Entonces lo que sucede, a grandes rasgos, es que quién debería haber tomado la mayor cantidad de medidas precautorias para realizar la prueba era Pirelli –a quien no se puede sancionar en un grado efectivo– seguido por Mercedes GP y, después, la FIA al dar seguimiento a los cuestionamientos de los alemanes e italianos.
El problema aquí fue la diligencia con la que se actuó por los involucrados. Pirelli por no cumplir, a sabiendas, con las estipulaciones para llevar este tipo de pruebas y mantener en el error a Mercedes GP y la FIA. Los alemanes que dejaron todo en manos de la llantera cuando pudieron asegurarse mediante el cuestionamiento a otros equipos sobre la invitación realizada por Pirelli y, aún el día de la prueba, negarse a correr de no obtener dicha confirmación por escrito de fuentes distintas a la de la fabricante de neumáticos. Finalmente, la FIA estaba consciente que se estaba preparando una prueba por lo que debió mantener un mayor nivel de vigilancia sobre dichos acontecimientos en aras de garantizar que se cumpliera con los requisitos indispensables para celebrarla.
Más allá de eso, no había mucho que imputarle a Mercedes GP para una sanción más fuerte y el Tribunal se dio cuenta de ello pues la falta de los alemanes romper las reglas –así de claro– deportivas de la FIA y obtener una ventaja mínima, al menos, al saber que no ocurrió nada malo con los compuestos probados, pero sin dolo alguno al realizar la conducta. Al final el Tribunal decidió que fue sin querer toda la prueba y los resultados de la misma.
Tres actores, tres niveles de culpa distintos pero Mercedes GP salió casi ileso al intercambiar las pruebas de pilotos jóvenes por pruebas con sus pilotos regulares aunque la información que generaron en Barcelona podría no serles tan útil como la que se generaría en la prueba de julio. Pirelli salió dañado, sobre todo Hembery, pero ante la falta de competencia en el mundo de los neumáticos para la Fórmula Uno puede tener mayor un poco de rango de error en este tipo de cuestiones, pero la temporada se está convirtiendo en un problema mediático para los italianos con la percepción de sus llantas y este tipo de escándalos. La FIA por su parte fue la menos perjudicada al no haber sido encontrada en error alguno.
Los grandes perdedores son Scuderia Ferrari y Red Bull Racing y los ganadores, probablemente, los aficionados pues tendremos pruebas en 2014 lo que podría beneficiar el espectáculo en la pista.
laplumadelzurdo@gmail.com
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